¿Cuánta gente es afectada, aproximádamente, por esta enfermedad mental?
Hasta un 3% de la población general tiene trastorno bipolar, una enfermedad poco conocida y, por lo mismo, muchas veces estigmatizada. Para darla a conocer y con el objetivo de que quienes la padecen no sean discriminados, cada 30 de marzo se celebra el Día Mundial del Trastorno Bipolar.
¿Cómo comienza a mostrarse esta enfermedad?
Esta patología suele comenzar en la adolescencia o adultez joven y forma parte del grupo de los trastornos del ánimo, ya que se manifiesta con diferentes episodios de alteración del ánimo:
- Euforia o manía
- Depresivos
- Mixtos
Asimismo, el trastorno bipolar se divide en dos tipos: con episodios de manía (tipo I) o hipomanía (tipo II), y en ambos también pueden presentarse cuadros depresivos, donde los pacientes presentan síntomas como:
- Tristeza
- Angustia
- Aumento o reducción de las horas de sueño
- Disminución de las ganas de hacer cosas
- Cansancio
- Cambios en el apetito
- Alteraciones de la concentración
Sentimientos de culpa, llegando incluso a ideas de muerte o suicidio.
¿Que dicen los expertos al respecto?
El Dr. Miguel Prieto, jefe del Servicio de Salud Mental de Clínica Universidad de los Andes, señala que “en las fases de ánimo eufórico o también llamadas fases maníacas, los pacientes presentan un ánimo anormalmente elevado o irritable, sentimiento de grandiosidad, aumento de la actividad y de la energía, disminución de la necesidad de dormir, incremento de conductas de riesgo y, en casos más graves, pueden aparecer síntomas psicóticos”.
El especialista agrega que existen factores genéticos y ambientales que predisponen a sufrir esta enfermedad: “el trastorno bipolar tiene un fuerte componente hereditario, siendo un factor de riesgo importante el antecedente de tener un familiar de primer grado (padre, hermano o hijo) con la patología. Sin embargo, los factores ambientales también juegan un rol en el inicio de la enfermedad, como la exposición a alcohol o drogas y traumas psicológicos en la infancia».
Frente a la sospecha de que una persona sufre trastorno bipolar, lo más recomendable es consultar a un psiquiatra para poder hacer un diagnóstico precoz y comenzar un manejo farmacológico y psicoterapéutico cuanto antes.
¿Cuáles son los tratamientos para el trastorno bipolar?
- Tratamiento farmacológico, con estabilizadores del ánimo para tratar los episodios agudos y prevenir episodios posteriores.
- Psicoterapia orientada a fomentar que los pacientes no abandonen el tratamiento, tengan herramientas para manejar el estrés y eviten situaciones o conductas que puedan desencadenar un episodio de la enfermedad.
- Intervenciones de rehabilitación funcional, que tienen como fin ayudar al paciente a sobrellevar las limitaciones que la enfermedad genera en términos de las capacidades para trabajar y para desenvolverse en la vida cotidiana.