El fatal hecho de sangre se registró hace algunos días, pero trajo a la luz episodios de abusos sexuales sufridos por la hija del imputado, y nieta del fallecido, cuando ella tenía aproximadamente 5 años de edad.
Presuntos episodios de abuso sexual que habría sufrido una menor de cinco años de edad ocurridos hace aproximadamente una década, fueron los detonantes de un violento asesinato registrado hace algunos días en el centro de Curicó, en plena vía pública. El hecho fue protagonizado por el padre de víctima que dio muerte, propinándole más de una quincena de puñaladas, al abuelastro de la niña.
Recordar que el grave incidente se produjo pasadas las 09:00 de la mañana en la calle Merced a metros de la avenida O’Higgins, a solo dos cuadras de la plaza de armas de la ciudad. Allí se trabaron en “palabrazos” dos hombres, uno de ellos que transitaba en bicicleta, Fabio Andrés Contreras Diaz, de 37 años de edad, y José Concha Reyes, de 67, quien acababa de estacionar su motocicleta fuera del local de comidas en que trabajaba.
“Solo tenia cinco años”
Los “palabrazos” no tardaron en pasar a la violencia, terminando con el primero asestándole numerosos ataques a Concha Reyes, cayendo este último herido de muerte en la vereda, para luego ser trasladado al Hospital provincial donde a los minutos siguientes murió a causa de las graves heridas en el rostro, abdomen, espalda. En tanto el agresor, quien gritaba “solo tenía cinco años, solo tenía cinco años”, esperó la llegada de carabineros que lo detuvo.
Una hora antes de la audiencia de formalización de cargos criminales contra el detenido, comenzaron a conocerse antecedentes el origen del violento hecho de sangre, ya que una veintena de cercanos, amigos, familiares, incluso las hijas de Contreras se instalaron en el frontis del tribunal con pancartas y carteles pidiendo justicia, no solo en alusión al caso homicida, sino también a delitos de abusos sexuales, que habría sufrido una menor.
Homicidio calificado
El fiscal Felipe Novoa al formalizar la investigación por el delito de homicidio calificado, narró que el hecho se produjo con las agravantes de premeditación y alevosía, es decir que habría sido planificado, con conocimiento previo, y además explicó, que el desarrollo del desenlace dejó 16 estocadas en el cuerpo de la víctima, 10 de ellas penetrantes corporales y 6 no penetrantes, que causaron inevitablemente el deceso del adulto mayor.
La abogada defensora del imputado, Macarena Pereira, discrepó de la calificación del delito, argumentando que no hubo ensañamiento, ni preparación del crimen, y que todo se dio en el contexto que ambos hombres se encontraron “casualmente” en la calle, Fabio mientras iba a comprar pan de completos para su local de comidas y José Concha que llegaba al negocio, también de alimentación, de propiedad de su hijo.
Denuncia por abuso
La profesional reconoció “que el hecho que origina esta instancia, un contexto determinante, es que el fallecido y mi representado se conocían por parentesco familiar, siendo el fallecido ex cónyuge de la suegra de mi representado y por tanto, abuelastro de los hijos (del imputado), y en esas circunstancias en septiembre del 2024 el fallecido fue denunciado por una de las hijas de mi representado por el delito de abuso sexual”.
“El fallecido siendo investigado por realizar graves conductas de abuso sexual (contra) la hija de mi representado, desde los siete años de edad, cuyos hechos consisten en tocaciones en sus genitales por sobre la ropa y bajo de ella, acto seguid comenzaba a masturbarse delante de la niña, en ocasiones la besó a la fuerza en los labios, y se subió encima de ella, en otras la niña se despertó con el sujeto detrás de ella mientras le realizaba tocaciones en los genitales”.
Un acto de defensa
La abogada agregó al relató que “incluso estaba denunciado que le suministraba (a la menor) somníferos para hacerla dormir, adicional a eso, este hombre le decía ‘que jamás estaría con otro hombre porque la dejaría fea, porque le pertenecía solo a él’, también la amenazaba con asesinar a su padre, mi representado, si ella decía algo de lo que ocurría; además existen causas por los mismos hechos ante el juzgado de familia de Curicó”, afirmó.
Como antecedente la defensora sumó que la víctima por estas denuncias realizadas el año pasado, tenía en su contra “una orden de prohibición de acercamiento, la que estaba vigente”. En tanto, añadió, que el arma homicida habría sido portada por la víctima y que su defendido en un acto “de defensa” se la haría arrebatado, al adulto, quien presumiblemente, a juicio de esta parte, habría lanzado la primera agresión.
Prisión preventiva
Tras los argumentos de ambas partes, el fiscal solicitó la aplicación de la medida de prisión preventiva, lo que fue acogido y decretado por el tribunal, por lo que Fabio Contreras fue enviado al centro de cumplimiento penitenciario, mientras que el plazo de cierre de la investigación fue fijado en tres meses.
En cuanto a la denuncia de abuso sexual, se indicó en la audiencia que esta expiraba, como asimismo la investigación, junto a la muerte del presunto autor de estos hechos registrados entre los años 2015 y 2016, hace cerca de una década.














