¿Cómo interpreta las cifras regionales de desempleo?
“El 7,1%, si bien es un 1% superior a lo que fue igual trimestre hace doce meses, la cifra esconde un subempleo y el crecimiento notable de trabajos que han sido esporádicos, haciendo que las personas si bien se pueden considerar como ocupadas, lo son en un tiempo bastante menor a lo que era habitualmente. Por tanto, allí hay un elemento que la cifra no da cuenta”.
¿Cuál es el análisis respecto al desempleo informal?
“En este periodo estival, donde se ubica el trimestre móvil en estudio, ha dado cuenta de la pérdida brutal del desempleo informal. El Maule había compensado el desempleo como cifra global con el trabajo a cuenta propia o informal, equilibrando la pérdida de ocupados. Pero en estos periodos en que se generan confinamientos, el trabajo informal es el que se ve más agravado y, por lo tanto, la cifra de personas que pierden el empleo aumenta en forma significativa. Además, en la informalidad, quienes más pierden el trabajo son las mujeres, las cuales habían compensado las carencias socioeconómicas, saliendo a buscar ingresos y recursos a través de la informalidad, ya sea en el comercio ambulante, la agricultura y los servicios, dado la pérdida de sus ocupaciones tradicionales”.
¿Qué aspecto le llama la atención respecto a la situación en materia de empleo?
“Una nota bien especial hay que hacer respecto de las mujeres que hacen labores de servicios en el hogar, como asesoras del hogar, las que en el Maule se han visto brutalmente afectadas. De hecho, durante el 2020, el nivel de pérdida de ese empleo supera por mucho a las demás actividades. Estamos hablando que el 75% del trabajo de asesora del hogar es informal. Y ese empleo se ha perdido casi en su totalidad. Entonces, las mujeres han sido muy golpeadas en cuanto a la ocupación”.
¿Cómo será la evolución del desempleo atendida la situación epidemiológica?
“Mientras tengamos este crecimiento enorme de los contagiados y la pandemia siga, las condiciones no van a mejorar. Más todavía en regiones como el Maule, donde la informalidad es muy importante, porque más de un tercio de los ocupados tiene que ver con ese tipo de empleo. Y la informalidad es la más afectada por la pandemia. Sin duda que esto da cuenta de la precariedad de nuestra región, poniendo a la seguridad social como uno de los desafíos más grandes. Hay que pensar en recuperar la dignidad, calidad del empleo y la protección social y laboral a los trabajadores”.