Tras varios dias de agonía y pese al esfuerzo desplegado por personal médico del Hospital de Curicó por salvarle la vida, finalmente el vecino de la comuna de Hualañé, murió producto de las lesiones que recibió tras ser golpeado brutalmente con un elemento contundente por su hijo, supuestamente que padece transtornos siquiatricos, por lo que fue internado en un centro especializado.
Recordar que el violento episodio familiar se registró a fines del mes de octubre reciente al interior del domicilio ubicado en el callejón Santa Teresa, sector Parronal, donde la víctima de 67 años, James Bernard Frazer Ormazabal, vivía junto a su hijo, uno de ellos en la parte posterior de la propiedad.
Por causas que son materia de investigación, presumiblemente a causa de un altercado o discusión, este último identificado como Danny James Frazer Panadés, de 46 años, atacó a su padre con un elemento contundente y pesado ocasionando lesiones de extrema gravedad que obligaron su urgente traslado al hospital de Curicó.
El agresor fue detenido por carabineros y puesto a disposición del Tribunal de Garantía de Licantén donde la fiscal jefe del Ministerio Público en esa comuna, Mónica Barrientos expuso que «el imputado se encontraba en el domicilio junto a su padre el lunes 27 de octubre y procedió a agredirlo de manera bastante violenta con un elemento contundente, lo que provocó que la víctima quedara con riesgo vital e internado en condición bastante delicada en el Hospital de Curicó».
Por lo anterior «fue formalizado por parricidio en grado de desarrollo frustrado y con la medida cautelar de internación provisional en un centro psiquiátrico”, indicó la fiscal jefe de Licantén, Mónica Barrientos, agregando que lamentablemente a los dias siguientes, el 06 de noviembre, la víctima falleció.
Al ser consultada la profesional, indicó que el deceso del adulto no cambia la formalización, solo «el desarrollo del delito, de frustrado a consumado, y por ello ante una eventual pena, también la pena es mayor».
Sostuvo que ahora resta sumar a la investigación el informe autópsico de la víctima y los resultados de un análisis siquiátrico del imputado, quien precisamente desde la audiencia de formalización se encuentra en un centro de atención siquiátrica, en la región metropolitana.
En todo caso, Barrientos precisó que de igual forma la pena que arriesgaría el imputado como presunto autor del delito de parricidio parte en los 20 años de cárcel y pudiera llegar a la cadena perpetua calificada, la más alta sanción considerada en legislación chilena, acotó.







