En la villa Don Sebastián de Rauquén, en la zona norte de Curicó en las últimas semanas se incrementaron los reclamos de la comunidad por el arribo de decenas de persona que acudían a la explanada del sector para elevar volantines en la previa de “fiestas patrias”. El problema de esto, no es la actividad propiamente tal, sino el hacerlo utilizando el peligroso hilo curado y además aprovechar el lugar para consumir alcohol y drogas.
Es por eso que este fue el lugar elegido por la autoridad provincial junto a la empresa eléctrica CGE, carabineros y la Corporación nacional forestal (CONAF), para lanzar la campaña contra el uso de hilo curado y también contra las incivilidades que pudiera traer consigo esta actividad, recordando, dijo el Delegado Presidencial José Patricio Correa, que comercializar y usar este de elementos, no solo es un riesgo, sino también un delito.
“Este espacio se ha utilizado no solo para elevar volantines, sino que también se ha detectado venta de hilo curado, por lo que queremos recordar que elevar volantines con hilo curado, en nuestro país esta prohibido y además es un delito y que tiene asignadas altas penas, incluso su flagrancia implica la detención inmediata; por eso vamos a estar fiscalizando, para que este espacio sea ocupado por las familias, en forma sana y sin riesgos”, afirmó.
En tanto Manuel Santibáñez, de la CONAF, precisó que la utilización del hilo curado, trae también otros peligros, por ejemplo, cortar los conductores o cables eléctricos, los que al caer energizados sobre pastizales o arboles puede además generar incendios forestales, con las consecuencias que esto significa para la comunidad y el entorno,
Esto fue fue complementado por Hardy Scheinffelt, de la CGE, quien precisó que en todo sentido el uso de hilo curado trae peligros: “Es un daño para todos, para el sistema que puede sufrir cortes, en los conductores, que a la calidad de servicio y también para las personas”.
Johana, delegada de los vecinos, resaltó esta campaña que permitirá “salir a los niños a las calles a jugar, incluso a las mascotas, ya que nos da miedo salir a causa del hilo que queda en los árboles o que queda cruzado, arriesgando a cortes, y además además consumiendo alcohol o drogas en el sector en que elevan los volantines”, acotó.