(Opinión)
Siempre se ha mencionado que Curicó posee una de las plazas más hermosas de Chile, gracias a sus elementos decorativos, a las 60 palmeras que la circundan y al verdadero museo al aire libre que en el siglo reciente se fue formando en su centro. De hecho, todo esto la llevó a ser declarada, en el año 1986, como Zona Típica, y por ello preservada por el Consejo de Monumentos Nacional.
Esto último, según autoridades locales, cobra relevancia a la hora de observar los límites de esta “Zona Típica” y todo lo queda al interior de ellos, ya que dentro se encontraban los edificios, como del Club La Unión, Diario La Prensa, y el de una entidad bancaria, entre otros, precisamente frente a la plaza de armas, los que cayeron destruidos por los movimientos del terremoto del 27 de febrero del 2010
Dos décadas de espera
Han pasado más 22 años y los edificios no lo han logrado ser reconstruidos. Ello, pese a los esfuerzos, insistencias, proyectos e intenciones de los propietarios de los terrenos; Y es que, como una réplica intensa y permanente del terremoto, la fuerza de Monumentos Nacionales ha obstaculizado e impedido que esa zona típica, junto a la plaza de Curicó, vuelva a ser la misma, o a lo menos parecida.
Ocurre todo lo contrario: hay lugares de esa zona típica, que son ocupados por estacionamientos, en su minuto por ferias comerciales o simplemente allí hay sitios eriazos. Sobre esto, en el municipio local, solo se levantan de hombros ya que desde el ámbito local no se puede hacer mucho, porque –explican- los terrenos son de privados y las decisiones del Consejo Monumentos Nacionales, por lo que solo queda levantarse de hombros y seguir esperando.
Ex Cine Victoria.
Algo parecido ocurre con el que fuera el ex Cine Victoria – Monumento Nacional desde el 2015- “cascaron” que no posee ni siquiera ruinas, a metros de la zona típica y cuyo propietario, por lo anterior no puede intervenir, construir, ni reconstruir, por lo que ha optado por simplemente colocar un letrero “Se Vende”. Así las cosas, una Zona Típica que no es tan típica, y una plaza hermosa, cuyo entorno, hace rato dejó de ser tan hermoso.