Complicados se vieron los ramaderos durante los últimos días, especialmente entre la noche del miércoles reciente y la jornada del jueves, luego que sus locales de fondas o cocinerías fueran afectados por la lluvia y el intenso viento que hizo que algunas de las estructuras colapsaran o los terrenos se anegaran, por lo que no se descarta que ante las consecuencias se pida la aplicación de un “18” chico.
El fuerte viento del miércoles causó más de algún dolor de cabeza a estos comerciantes y luego el arribo de la intensa lluvia que, en conjunto amenazaron las celebraciones de Fiestas Patrias, y en algunas comunas los fonderos fueron colocados en jaque, por ejemplo, en el Médano de Licantén, en Molina y en Villa Prat de Sagrada Familia, donde las estructuras cedieron. Esto motivó trabajos de emergencia.
En esta última comuna el alcalde, Osvaldo Jorquera, señaló que ante la situación se activaron las obras de apoyo a los afectados en Villa Prat, y también en La Isla de Sagrada Familia, con el objetivo de evitar interrumpir las celebraciones, por lo cual ante los anegamientos se distribuyó material, y ante los efectos en los encarpados se determinó por trabajos de rearmado y de fortalecimiento de las estructuras.
Ante este tipo de situaciones y en que en casos derechamente se debieron suspender o postergar las celebraciones en ramadas la Senadora por esta zona, Paulina Vodanovic dijo que “solicitaré formalmente a las autoridades comunales como también gubernamentales, se pueda realizar un ‘18 Chico’ al menos en las comunas que suspendieron actividades, para que así puedan recuperarse de las pérdidas por mal tiempo”.