El Tribunal de Garantía de Curicó determinó enviar a prisión preventiva a 11 de los individuos que habían sido detenidos en el contexto de la Operación “Tierra Santa”, diligencia que la semana pasada fue desarrollada por la Policía de Investigaciones en la población Santa Lucia de esta ciudad, y que adempas permitió incautar joyas, drogas, vehículos avaluados en más de 400 millones de pesos.
¿Qué pasó?
Más de 300 detectives, pertenecientes a unidades de la PDI, desde la región de Coquimbo hasta Ñuble, desarrollaron un operativo relámpago y simultáneo en distintos puntos de la populosa población Santa Lucía, en la parte surponiente de Curicó, logrando la detención de una veintena personas vinculadas al tráfico y microtráfico de drogas.
La acción policial se llevó a cabo en absoluto hermetismo y con apoyo de un helicóptero institucional de la policía civil, lo que permitió incautar diversas sustancias ilícitas, como pasta base, marihuana y clorhidrato de cocaína y drogas sintéticas, dijo el jefe zona de Antinarcóticos de la PDI, Prefecto Eduardo Flores, refiriéndose a los resultados de la diligencia.
¿Cuántos fueron los detenidos?
El fiscal regional Julio Contardo indicó que en suma se detuvo a 24 personas, de las cuales 19 fueron puestas a disposición de la justicia; en forma paralela se incautaron drogas (por ejemplo, cocaína avaluada en 50 millones) 10 vehículos deportivos y de alta gama (equivalente a 200 millones de pesos), joyas de oro, además de 35 millones de pesos en dinero en efectivo, junto a una decena de armas de fuego.
¿Qué pasó con los detenidos?
Los detenidos, en tanto, hombres y mujeres pasaron a disposición del Tribunal de Garantía de Curicó, para ser formalizados por los delitos, algunos de ellos, de Asociación ilícita, lavado de activos, tráfico de drogas, microtrafico y tenencia de armas de fuego, entre otros.
De los sujetos capturados, 8 quedaron sometidos a medidas cautelares alternativas, como arraigo y forma mensual, mientras que los 11 restantes, fueron enviados a prisión preventiva. Estos últimos corresponderían a los cabecillas de clanes que se desenvolvían en diversos puntos de la población Santa Lucia.
