La comunidad recibió con pesar la noticia del fallecimiento, a los 88 años de edad, de Manuel Barroso Álvarez, ciudadano de origen español que desde su arribo a Chile en 1952 formó parte activa de la colectividad hispana en Curicó.
Barroso llegó a Chile en la década del 50, estableciéndose en Curicó, donde cimentó una vida ligada tanto al comercio como a la agricultura. Fue ampliamente recordado por su carácter cercano y su permanente disposición hacia la comunidad.
Durante la década de 1980, junto a su familia, fue propietario de la recordada Casa Comercial Caperucita, local especializado en ropa para bebés, que se convirtió en un punto de encuentro para numerosas familias curicanas de aquella época.
Con el paso de los años, Barroso se consolidó también como agricultor, manteniendo un fuerte vínculo con la tierra y con las tradiciones que heredó desde su España natal. Su figura se integró de manera indisoluble al desarrollo social y cultural de la ciudad.
En su partida deja a su esposa y a sus hijos, Manuel y María José, quienes junto a familiares, amigos y cercanos lamentan profundamente su deceso, el que se registró mientras dormía.
El velatorio se lleva a cabo en la Iglesia Santuario del Carmen de Curicó, mientras, mientras que la misa de despedida se realizará mañana jueves a las 15:00 horas en el mismo templo católico, para luego ser llevado hasta el mausoleo de la colectividad hispana, en el cementerio municipal de esta ciudad
Desde este medio expresamos nuestras más sentidas condolencias a la familia Barroso Álvarez en este difícil momento.